Éxito rotundo de la nueva edición del festival.
Ha sido nuestra tercera visita al Festival Gigante, por diversos motivos no ha sido tan larga como otros años pero igualmente ha sido enriquecedora y la hemos disfrutado a tope. Siempre esperamos con ganas la llegada del Gigante y este año tampoco nos ha defraudado, con un cartel siempre potente y apetecible la cita de Guadalajara se ha terminado convirtiendo en una de las fijas dentro de nuestro calendario de festivales.
Llegamos el jueves pronto, dispuestos a gozar con el ambiente de las primeras horas del festival y lo primero que nos encontramos es que el espacio había cambiado respecto a otros años. No en los escenario principales pero si en la zona de restauración y en el escenario emergente. Un espacio mejor aprovechado que en otras ocasiones nos daba la ocasión de poder disfrutar de los conciertos con menos aperturas.

Otro cambio que advertimos fue que en la entrada del festival habían colocado un nuevo escenario desde el cual los djs nos iban calentando a base de temazos antes de entrar en el recinto. Una experiencia más que añadir al Gigante y que sin duda dejo muy buen sabor de boca.
Entrados ya en materia y habiendo tomado situación del lugar nos dispusimos a ir hacia el primer concierto de la tarde. El sol caía sin piedad sobre Guadalajara pero eso no impidió que varias decenas de valientes nos congregáramos para ver a Desvariados en el escenario Gigante. La banda cambio la plaza por el recinto en un año y supieron aprovechar a la perfección esta oportunidad. Como siempre mostraron un show potente, dinámico y cargado de mucho rock and roll.
Era momento de acercarnos hacia el escenario Coca Cola, símbolo de las bandas emergentes y por el que en anteriores ediciones habían pasado grupos como Shinova, Los Vinagres o Playa Cuberris. Los primeros en abrir las hostilidades en dicho escenario fueron Marcus Valley, quienes dejaron muy buen sabor de boca pese a lo temprano de su actuación y el calor que reinaba en la tarde.

A eso de las 19:15 fue el turno de SeñorNadye. La banda jugaba en casa y pese a los nervios que eso puede conllevar despacho un concierto por todo lo alto en el que presentaron su nuevo disco ¨Cuando todo explote¨. Tremendo lo de esta banda que en apenas 1 hora dejaron con la boca abierta al numeroso publico que se acerco hasta el escenario para observar sus evoluciones. No muy lejos de allí, en el escenario principal, Luis Brea seguía dejando claro que es un grande. Como siempre concierto sin paliativos, de esos que te golpean el mentón y te dejan ko.
Una de las sorpresas de la noche fue Badlands. Los valencianos nos dejaron totalmente en shock con su concierto. Su mezcla de blues, country y rock hizo temblar el escenario Coca Cola, pasamos bastante tiempo en el ya que siempre nos tiene preparadas alguna sorpresa. Salimos totalmente emocionados del concierto de Badlands y hicimos tiempo para ver a otra de las bandas emergentes que teníamos entre ceja y ceja.

Nos referimos a Gotelé, los abulenses venían con la vitola de haber conquistado festivales tan importante como Sonorama o Locos Arenas, donde compartieron escenario con Sidecars, y la verdad fue que también pusieron su pica en el Gigante. Excelso concierto el de la banda, con su estilo directo, letras que te hacen emocionar y esa fuerza y energía que les convierte en un autentico ciclón sobre el escenario. La espera mereció la pena y vivir en directo temas de su disco ¨Vertical¨como ¨Hacedles despertar¨, ¨Alas de cera¨o ¨Se buscan¨hizo de la entrada en la noche algo digno de recordar.
Desde ahí todo fue un carrusel de emociones, desde la vuelta de Despistaos, la fuerza siempre irreductible de Sexy Zebras o ese show tan especial que siempre nos brinda Amatria. Todo eso se junto en la parte final del primer día en el Festival Gigante, donde solo el cansancio pudo con nosotros y las ganas de poder cerrar el recinto. Tocaba descansar, retomar fuerzas y volver al día siguiente para seguir disfrutando, aunque el destino nos tenia preparada una jugada imprevista…..