¨Creemos que todo es posible con trabajo y con ilusión¨

- ¿Quiénes sois Destino 48?
Destino 48 somos una banda de rock, formada en Gijón el verano de 2009. Actualmente la componemos Jaime (guitarra y voz), Talo (batería), Medina (guitarra) y Jorge (bajo), y nos acompaña en los directos Guille Rubio (Mara), a la guitarra.
Hasta la fecha, hemos publicados dos discos: «Esto no es un simulacro » Y «Sol de invierno», que estamos presentando ahora.
- Para entender mejor la música de Destino 48, ¿qué influencias musicales tenéis?
Cada uno escucha una cosa, y quizás eso ayuda a enriquecer lo que hacemos. El hecho de tener perspectivas e influencias distintas es muy positivo a la hora de hacer canciones. Aún así, hay lógicamente gustos comunes. Nos encanta el rock americano (escuchamos mucho a Ryan Adams y a Dawes últimamente), y también lo de aquí: Quique González, MClan, Xoel López… Están siempre presente en nuestras canciones.
- Vuestro último trabajo es ¨Sol de invierno¨, ¿cómo se gestó?
Sol de Invierno es el resultado de 3 años escribiendo canciones. Teníamos claro que queríamos darle continuidad a lo que habíamos empezado con «Esto no es un simulacro», y hacerlo con coherencia. Por ello, no es una ruptura con lo anterior, más bien un proceso de evolución y de crecimiento musical. Cuando por fin teníamos unas cuantas canciones nuevas y nos vimos preparados, nos decidimos a trabajar a fondo en ello.
- ¿Que queréis transmitir con él?
Con este disco queremos transmitir una idea clara: hemos venido para quedarnos.
- ¿Qué importancia tienen las letras para Destino 48?
Las letras son el eje central de nuestras canciones. Tratamos siempre de construir los temas a su alrededor. Por eso elegimos escribir en castellano; nos parece la forma más natural que tenemos de trasmitir lo que queremos contar. Le damos mucha importancia.
- Habéis grabado con Chapo González y Antonio López, ¿cómo ha sido la experiencia?
Sin duda el trabajo de producción que han hecho Chapo y Antonio ha sido una de las claves para sacar el proyecto adelante. Desde el principio supieron entender bien lo que queríamos; nos han ayudado mucho en la construcción de las canciones y nos han dirigido muy bien dentro del estudio.
Como experiencia ha sido increíble. Son gente de primera división, en lo musical y en lo personal.
- En este nuevo trabajo se escuchan nuevos instrumentos, ¿cuáles son?
En líneas generales, el disco se encuadra bien en el código clásico de rock. Guitarras acústicas, eléctricas, batería y bajo. Los vientos tienen importancia en dos temas del disco, y también el pedal Steel en «A ras de cielo». La novedad principal ha sido introducir un trío de cuerdas (se puede escuchar en «Son las reglas» y en la «Última canción»). Nos apetecía experimentar un poco y creíamos que en ambas canciones encajaban bien.
También nos hemos atrevido con los sintetizadores en la «Luz de tus ojos», donde cierran el tema.

- En septiembre estuvisteis en Madrid, concretamente en la sala Costello, ¿cómo fue la experiencia?
La primera presentación del disco en Madrid fue muy positiva. Conseguimos colgar el «Sold Out», y el feedback que recibimos fue muy bueno. Ahora hemos cerrado una nueva fecha, esta vez en la sala Moby Dick el 22 de abril, para darle continuidad. Es un poco más grande, pero vamos a por ello.
- En vuestro caso, estudiáis y trabajáis, ¿de dónde sacáis el tiempo para hacer todo?
Con poco tiempo libre, una buena planificación y organizando cada minuto es posible.
- ¿Creéis que se puede llegar a vivir de la música?
Creemos que todo es posible con trabajo y con ilusión. Aún así, somos consciente de que la situación actual es complicada para la música que hacemos, y que vivir de ello es muy difícil.

- ¿Cómo ha sido la evolución de Destino 48 desde sus inicios hasta este ¨Sol de Invierno¨?
Han pasado 7 años desde que formamos la banda, y poco a poco se ha ido desarrollando una profesionalización en todos los aspectos. Lo que empezó siendo un hobby es ahora un proyecto con entidad que nos ilusiona.
«Sol de invierno» recoge bien esa evolución. Es un disco más maduro en todos los sentidos (canciones, producción, sonido, referencias…). La banda ha ido creciendo con el tiempo, y creemos que con este disco hemos conseguido definir nuestro sonido propio.
- Una ciudad
Madrid
- Una sala donde os gustaría tocar
La Joy Eslava
- Y ya para terminar, ¿qué planes de futuro tenéis en mente?
Nos encantaría que este disco nos abriese una puerta a los festivales nacionales, y que en las ciudades a las que aún no hemos ido, empezase a escucharse nuestra música.
En resumen, tocar todo lo posible y afianzarnos un hueco en el panorama nacional, peleándolo concierto a concierto.
