Canciones que se recuerdan.
Ahora que el jefe va a ser padre es buen momento para recordarle todos aquellos nombres que no escogió para su hija y, qué mejor manera de hacerlo que con música y con estos 10 temazos con nombre de mujer. Seguro que faltan muchos ‘imprescindibles’ por lo que no dejéis de sugerir vuestros favoritos y/o de ponerme a parir en Twitter. Vamos allá, a la salud de Raúl… ¡Dadle al play!
“Jolene” de Dolly Parton
Comenzamos este breve viaje con una canción atípica. Es fácil pensar que todas las canciones con nombre de mujer provienen de un atormentado músico que trata de conseguir lo imposible, o sea, el amor de ‘esa’ mujer. Pero no, amigos. Una de las más brillantes canciones de este inmenso grupo de canciones es “Jolene” y la escribió la aún más inmensa Dolly Parton.
Jolene, Jolene, Jolene, Jolene
I’m begging of you please don’t take my man
Jolene, Jolene, Jolene, Jolene
Please don’t take him just because you can…
Efectivamente, la canción trata sobre una mujer que suplica a otra que no le quite a su marido.
¿Pero quién demonios querría a Jolene teniendo a Dolly Parton?
“Layla” de Derek & The Dominos
Alabado sea nuestro señor Eric Clapton, San Duane Allman y todos los Dominos. Qué puedo decir. Esta canción y este disco se merecen libros enteros. Duelos de guitarra imposibles entre Eric y Duane, la voz desgarradora de Slowhand junto a la de Bobby Whitlock, la base rítmica de Carl Radle y Jim Gordon y un final de canción en el que perfectamente me podría quedar a vivir. Vale la pena volver a escucharla una vez más.
Layla, you’ve got me on my knees
Layla, I’m begging, darling please
Layla, darling won’t you ease my worried mind…
Este desesperado himno cuyo nombre se inspira en el poema persa Leyli y Majnún, es el mayor intento de Clapton por conquistar a Pattie Boyd, la, por entonces, mujer de George Harrison, su mejor amigo.
Derek & The Dominos no volvieron a grabar un disco juntos, pero Clapton terminó consiguiendo su propósito, aunque a la larga no les fue especialmente bien. Sin duda, es difícil resistirse a una canción así, ¿verdad?
“Ophelia” de The Band
Por algo The Band era La Banda. Por algo fueron los elegidos por Bob Dylan para dar el salto al rock. Por algo revolucionaron la música de su tiempo y fueron referentes para tantos y tantos músicos. Por canciones como esta:
Ashes of laughter
The ghost is clear
Why do the best things always disappear
Like Ophelia…
Un tema que, en palabras del propio Robbie Robertson, bien podría haber sido compuesta en Nueva Orleans en los años 30. Esa era, de hecho, una de las claves de The Band, tomar el legado de la cultura norteamericana y hacerla suya. Martin Scorsese dio fe de ello en The Last Waltz:
“Sara” de Bob Dylan
Y hablando de Dylan. No podía falta la obra que el maestro dedicó a su primera mujer con quién se encontraba en un momento complicado que desembocó en su ruptura.
Now the beach is deserted except for some kelp
And a piece of an old ship that lies on the shore
You always responded when I needed your help
You gimme a map and a key to your door…
Una canción melancólica que recuerda dulces momentos con el amargo sabor de algo precioso que está llegando a su final. Fue parte del colosal disco Desirede 1976, cuyas baterías, violines, armónicas y letras hacen de él uno de los álbumes más infravalorados del genio de Minesota.
“Marianne” de Mipso
Si nos alejamos un poco de los grandes clásicos en femenino encontramos maravillosas joyas como esta pieza. Un bonito ruego entre enamorados para dejar atrás todo aquello que alguna vez les hizo sentir atrapados…
We’ll be gone again before it gets too far
And this time, I won’t look behind me
We’ll be gone again and I know what I’ll do
When it’s time to choose between this town and you…
Mipso es una banda fundada en Carolina del Norte con cuatro discos sobresalientes a sus espaldas en los cuales tejen con mimo preciosas melodías, preciosas armonías, preciosos violines y preciosos arreglos sobre una base de bluegrass ligero.
También con nombre de mujer encontramos un corte en su primer disco, “Louise”, que cumple con todos los atributos de esta tan recomendable banda.
“Sylvia” de Focus
Los holandeses son una de las agrupaciones más peculiares del rock progresivo de los años setenta. La dupla de Jan Akkerman, un guitarrista excepcional que llegó a tocar incluso con Paco de Lucía, y el multinstrumentista Thijs van Leer, a quien pudimos ver junto a Miguel Ríos en la histórica gira Rock & Ríos, hicieron las delicias de los fans de este género con temazos como Hocus Pocus o la pieza que nos ocupa.
“Oh Yoko” de John Lennon
Parece que todos recordamos a Yoko Ono como la mala de la película en la separación de los Beatles (¡nunca te lo perdonare Yoko!) o por sus insufribles gritos encima de un escenario. Cuando te das cuenta de que inspiró a su amado John para componer esta bella canción se te olvida un poco todo lo demás…
In the middle of the night I call your name
Oh Yoko…
Sin duda, una gran canción de ese gran álbum llamadoImagineque Lennon publicó en solitario allá por el año 1971. Buenos recuerdos. Ya lo creo. Gracias Yoko.
“Lola” de The Kinks
Lo sé. Quizá esta canción no debería estar en la lista. Resultó que Lola guardaba una sorpresa entre las piernas, pero yo ahí no me meto. A veces las noches no acaban como uno había planeado. El caso es que Ray Davies se pinchó con la barba de Lola y que la BBC vetó esta canción, pero nada ni nadie pudo evitar que esta bonita historia se convirtiese en un himno imperecedero por el que brindamos 50 años después.
I pushed her away
I walked to the door
I fell to the floor
I got down on my knees
Then I looked at her, and she at me
Well, that’s the way that I want it to stay
And I always want it to be that way for my Lola
Lo lo lo lo Lola…
“Carolina” de M-Clan
No podía falta “Carolina” de una de nuestras bandas nacionales más importantes. Señoras y señores, desde tierras murcianas: M-Clan.
No queda en la ciudad esquina
tras la que yo me pueda esconder
siempre aparece Carolina
con algún tipo de interés…
Tarque y compañía se marcaron un tema sensacional en Sin enchufeque parece hablar sobre una jovencita obsesiva que le trae de cabeza al bueno de Carlos, pero que en realidad versa sobre una mujer mucho más madura, oscura y, especialmente, adictiva. “La reina de las medicinas que no se venden en famacia legal”.
“Martha” de Tom Waits
Permitidme que termine esta lista con uno de los discos más tristes y maravillosos que jamás se han publicado. El álbum debut de Tom Waits es el idóneo para llevar a cabo esa manía masoquista que tenemos los seres humanos de escuchar música melancólica cuando más jodidos estamos. Y es que Closing Timees un disco que te hace estremecerte hasta llorar y al mismo tiempo llena tu alma con su belleza inmensa. Desde “Ol’55” hasta la homónima “Closing Time”, pasando por, y perdón por el exabrupto, jodidamente acojonante “I Hope That I Don’t Fall In Love With You”. Los que hayáis estado acostados en la penumbra escuchando este disco sabéis a lo que me refiero.
Hello, hello there, is this Martha?
This is old Tom Frost
And I am calling long distance
Don’t worry ‘bout the cost
‘Cause it’s been forty years or more
Now Martha please recall
Meet me out for coffee
Where we’ll talk about it all…
“Martha” es una canción sobre un amor que ya pasado pero en el que el autor aún se encuentra atrapado. Como si lanzara un mensaje en una botella desde una isla desierta, Tom Frost trata de localizar a su antiguo amor. “Recuerdo noches tranquilas estremeciéndome junto a ti…”. Poco más se puede decir.